Cómo hacer esquejes de cannabis en 9 pasos

Para producir clones o esquejes de cannabis, lo que tenemos que hacer es cortar el extremo de la rama que está en crecimiento y enraizarlo. La clonación o esquejado consiste en esto. En general, cuando un cultivador habla de un clon, se refiere a cuando se corta y se enraíza una rama de marihuana.

Cuando clonamos lo que conseguimos es reducir el tiempo de maduración de la cosecha.

Herramientas necesarias para la clonación:

• Un invernadero
• Bisturí o herramienta de corte afilada
• Pulverizador
• Hormonas de enraizamiento
• Tierra
• Luz
• Agua

 

Una vez tengamos todo lo necesario, es el momento de ponernos manos a la obra

Paso uno: Planta madre.

Seleccionaremos una planta madre de la que sacaremos la clonación. Una planta madre puede ser cualquier planta que te guste. Normalmente, los cultivadores
escogen las plantas que más rápido florecen y que ofrecen mayor producción. Algunas variedades ofrecen muy buenos clones.

Si la planta que has escogido es difícil de clonar, lo mejor es lavar cada mañana la tierra con dos litros de agua por cada litro de tierra. En ningún caso añadas fertilizantes.

La mayoría de las variedades skunk e índica son fáciles de reproducir.

Los esquejes de las ramas más bajas son los más fáciles de enraizar, ya que contienen mayor nivel de hormonas naturales.

Paso dos: cortar los esquejes.

Una vez escogida nuestra planta madre, es el momento de coger las ramas y cortarlas.

Elegiremos las ramas más sanas y firmes y que tengan un largo de entre seis y diez centímetros. Eliminaremos dos o tres grupos de hojas con sus nudos para que el tallo se entierre adecuadamente.

Es importante que las ramas sean largas para dejar buen espacio cuando la enterremos. Ten en cuenta que debería haber, al menos, dos grupos de hojas fuera de la tierra y al menos un nudo enterrado.

A la hora de sacar los esquejes de cannabis, cortaremos a medio camino entre dos nudos. Conforme vayamos sacando esquejes, los meteremos inmediatamente en agua hasta que vayamos a plantarlos.

Paso tres: plantar en Jiffy.

Los jiffys son perfectos para la clonación y además son fáciles de trasplantar. Lo mejor es coger un clavo o un palito y hacerle un agujero al medio del jiffy, de unos 1,5 centímetros, para después colocar los clones con mayor facilidad.

Acto seguido, llenaremos la bandeja de jiffys con agua con nivel 5-6 de PH.

Paso cuatro: Hormonas de enraizamiento.

A continuación, sumergiremos el tallo cortado en líquido de enraizamiento. Lo ideal es que viertas un poco en un recipiente y tirar lo que sobre. Removeremos el esqueje en el líquido durante no más de 15 segundos y lo introduciremos en el agujero del bloque de enraizamiento. Pellizcaremos la parte de arriba del bloque para que la tierra y el esqueje estén en contacto.

Paso cinco: Riego

Regaremos ligeramente hasta que la superficie se humedezca. Es importante mantener los clones húmedos todo el tiempo, pero nunca dejes que se empape.

Paso seis: Iluminar los esquejes de cannabis

Con luz fluorescente de 18 a 24 horas diarias, los clones enraizarán mucho más rápido. La cantidad perfecta para los esquejes es la de un tubo fluorescente de color blanco frío a 15 centímetros sobre ellos, o una lámpara de halogenuro metálico de 400w a unos 120-180 centímetros.

Paso siete: humedad

Si la humedad no baja del 95% durante los primeros dos días, será mucho mejor para los esquejes de cannabis. A partir del tercer día, podemos bajarla hasta 80-85%. El invernadero nos ayudará a mantener la humedad a nivel alto.

Recuerda dejar aberturas para que el aire pueda entrar y salir y que los esquejes respiren. Además, pulverízalos con agua varias veces al día.

Como sabemos, la humedad atrae al moho. Por ello, lo mejor es cortar las hojas por la mitad para evitar que se solapen.

Paso ocho: Temperatura

Para conseguir los mejores resultados, mantendremos una temperatura de entre 24-27ºC. Si supera los 29ºC, el cultivo peligrará. Además, recuerda mantener la temperatura del aire fresca para reducir las enfermedades y mantener la humedad.

Paso nueve: Esquejes listos

Puede suceder que los esquejes se marchiten, pero recuperarán la rigidez en pocos días. Entre una y tres semanas, los esquejes de cannabis deberían estar enraizados. Cuando veas que las puntas de las hojas estén amarillentas, las raíces empiezan a salir del agujero y los clones crecen de forma vertical, significa que han enraizado.

Trasplanta los clones cuando las raíces crezcan por fuera del enraizamiento.

Solo trasplantaremos los clones más fuertes. Los más pequeños los mantendremos aún en la cámara de clonación. Es importante que no ubiques los esquejes bajo luz fuerte hasta que las raíces no se hayan desarrollado completamente.

Una vez trasplantados, los clones están listos para aclimatarse.