Esta variedad es sinónimo de relajación. La sensación provocada es más corporal, que cerebral y se extiende por el cuerpo dejando una envidiable distensión muscular a su paso. De hecho, suele emplearse con fines medicinales, y la recomendamos para quienes buscáis una ayuda para dormir y para distraer las tensiones. En función de la tolerancia de cada uno, y de las dosis consumidas, provocará un efecto u otro. Puede ser aliado para la risa floja en dosis más pequeñas y sinónimos de agotamiento en concentraciones más altas.

Se trata de un proceso rápido y fácil, sin trampa. Es una planta que cumple con su ciclo en menos de 70 días y poco exigente en dietas y cuidados. Por eso la aconsejamos para quienes no tenéis experiencia en el cultivo de cannabis. Porque es una genética agradecida: crece rápido y sana sin esmerarse uno demasiado. Y es que, recoge las bondades de una automática: está genéticamente programada para florecer a partir de la tercera semana, aun cuando no cumplamos con los requisitos del periodo vegetativo a rajatabla.

Por eso decimos que es una variedad perfecta para perderle el miedo a la complejidad de cultivar marihuana: porque crecerá por sí sola sin problema, y cuanto hagamos a su favor será recompensado con una producción mayor y de mejor calidad. Nosotros aconsejamos, por ejemplo, el aporte de 1/3 de fibra de coco a la mezcla de tierra con el fin de mejorar la ventilación del suelo y de acelerar de forma eficaz los procesos metabólicos.

Sexo	Autofloreciente
Genotipo	60% Indica / 40% Sativa
Cruce	Critical + x Roadrunner
Cultivo recomendado	Interior y exterior
Ciclo completo de vida	65-70 días
Producción en interior	25-100 g/m2
Cosecha en exterior	Principios de abril / Finales de octubre
Producción en exterior	70-200 g/planta
Altura en exterior	0,4-0,95 m
THC	Medio-alto
CBD	Medio